El viernes pasado, Alexei Navalny, reconocido como el principal opositor de Vladimir Putin en Rusia, realizó un breve recorrido en la colonia penal de Siberia donde estaba recluido. Según la versión oficial, se quejó de sentirse mal durante el paseo, colapsó y lamentablemente nunca recuperó el conocimiento. Navalny, de 47 años, había experimentado un deterioro en su salud durante los tres años de su encarcelamiento, alegando falta de atención médica y largos periodos de aislamiento. Previamente, en enero de 2021, fue arrestado tras meses de recuperación por un ataque con un agente nervioso.
A pesar de sufrir estas difíciles circunstancias, Navalny aparentaba estar de buen ánimo y salud en un video judicial grabado un día antes de su fallecimiento. Sin embargo, la versión de Rusia sobre lo sucedido en la prisión, conocida como IK-3 o “Lobo Polar”, no ha sido ampliamente aceptada por la comunidad internacional, que expresa dudas sobre las circunstancias de su trágica muerte.